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En Washington -Erik-
En Washington -Erik-
Obviamente no iba a quedarme de brazos cruzados, después de todo como genetista, experto y sobre todo, ciudadano, me parecía que lo más conveniente era asistir a la asamblea pública, pedir una audiencia y debatir con los responsables de la iniciativa en pos de evitar algo de lo que pudieran arrepentirse. Lo más rápido que fue posible me dirigí a Washington y temprano, el día señalado, me dirigí a la asamblea.
Me permitieron la audiencia y debatí con aquellos hombres durante horas, exponiéndoles los temas que traía en mi portafolios, explicando punto por punto el porqué proceder de aquella forma sería un error que costaría no sólo dinero, sino cientos de vidas y un rezago social que a la larga lamentaríamos y derivaría en caos innecesarios.
Fueron horas de debate y sólo conseguí una postergación de la formación de aquella comisión para investigar el tema, de modo que tenía tiempo para preparar algo que evitara el que se dicten semejantes leyes.
Al salir del lugar aquello era un pandemonium, pues había manifestantes con sus pancartas alrededor de la entrada. Algunos pocos a favor de la causa, otros, la gran mayoría, en contra y me gritaban cosas que dejaban muy claro que me veían como una especie de amenaza.
Sin embargo seguí mi camino, no haría caso de ninguna de esas provocaciones. Ahora sólo tenía cabeza para el proyecto a futuro que pudiera culminar con congelar definitivamente aquellas leyes arbitrarias.
Re: En Washington -Erik-
No se habia quitado las gafas ahumadas no quitado el sombrero, un perfecto disfraz donde no podrian saber su identidad. Accedió a la planta superior del congreso, en una zona donde no habia seguridad. Esa planta estaba cerrada, no habia nadie pero aun así se escondió en las sombras. Sus ojos se posaron en la figura en silla de ruedas que habia en el centro del estrado. 'Charles'- Susurró su nombre al verle debatir con los congresistas, intentarles convencer que los mutantes no eran una amenaza. Muchos de ellos le interrumpian y intentaban poner en contra todas sus teorias. Erik apretó los puños deseando matar a cada uno de ellos, destruir el congreso y hacerlo polvo bajo sus cadaveres.
En el exterior podia oirse los manifestantes humanos con pancartas diciendo 'Fuera los mutantes' ' los mutantes son una plaga' ' Deben de ser destruidos'
Apretó los dientes y salió del congreso por donde habia entrado, con los puños apretados, sintiendo como le hervía la sangre y como, a su paso, temblaba. Seguramente Charles había percibido su presencia, pero debia de marcharse antes de que ocurriese algo y poner en peligro a su amigo. Disimuladamente salio a la calle. Ver aquellos humanos diciendo aquello solo le producían provocación. ¿ Como Charles podía defender a aquellos humanos los cuales querían su destrucción?
Se quedó a un lado observando el panorama, mirando a la horda de humanos que rodeaban el Congreso y a Charles. Donde estaban sus X-Men?! Por qué estaba solo?! Erik pudo verlo de cerca, uno de los manifestantes anti mutans se acercó corriendo a Charles pillando le desprevenido. Erik tambien corrió y fué él quien se llevó el golpe en la cabeza. La madera clavarse en su craneo. Cayó al suelo y fué rodeado por un centenar de humanos que empezaron a darle patadas por todo el cuerpo. Se dejó llevar por sus sentimientos e emociones por Charles. No pudo utilizar sus poderes para librarse de ellos, cayó a los pies de la silla de ruedas de Charles, inconsciente con el primer golpe en la cabeza.
Re: En Washington -Erik-
Sin embargo, entre toda aquella multitud y la preocupación de poder pasar sin problemas, había algo que me preocupaba.
Había sentido la presencia de Erik en aquel lugar; en el segundo piso, sí, incluso había dejado dos guardias inconscientes. Al principio no entendí porque estaba ahí, es decir, lo suyo no eran las negociaciones y los debates legales, lo suyo era atacar y someter, nada más... eso lo había dejado claro la última vez. El que estuviera ahí me daba mala espina y me hacía sentir miserable de sólo pensarlo. ¿Desde que momento había dejado de confiar en él? Sí, lo sé, le guardé mucho rencor después de tantas cosas vividas, pero no dejaba de considerarlo mi amigo... ¡Valiente guía eres, Charles! Dividido entre la amistad que sientes por Erik y la desconfianza que te provoca. No creo que llegues muy lejos si sigues así.
La multitud gritaba más; había un auto preparado para mí al frente de la acera. Me dirigía hacia allá cuando sentí la amenaza por parte de un sujeto que corría hacía mí, armado con una viga de madera, listo para descargar el golpe.
Y de la nada apareció Erik, recibiendo aquel impacto en mi lugar. Me quedé helado al verlo, no esperaba que él se interpusiera entre el atacante y yo, que se arrojara de aquella manera sin pensar en nada, y mucho menos pensé que me protegiera.
Lo vi caer y en ese momento la gente se abalanzó contra él. Alarmado grité para que lo dejaran en paz, pero era en vano. Traté de abrirme paso, lo cual no era sencillo estando en la silla y con esa multitud enfadada. ¡Pero debía hacer algo!
Respiré profundamente... no me gustaba hacer esto, pero no me quedaba de otra. Congelé a estas personas y atraje al chofer del auto que me llevaría al aeropuerto para que me ayudara a llevar a Erik al vehículo, ya que había caído inconsciente frente a mí.
El hombre llevó a Erik al auto y luego me ayudó a subir. Ya dentro, descongelé a la gente al tiempo que el vehículo arrancaba.Mi cabeza daba vueltas por la confusión: Erik herido, yo paralizando humanos para protegerlo... ¡¿Qué demonios estaba pasando?!
Re: En Washington -Erik-
Otro golpe en la cabeza y perdió el conocimiento antes de sentir el dolor de las patadas en todo su cuerpo causándole graves heridas. Ni siquiera se enteró de como Charles le salvó del a horda de maniáticos anti mutis. Utilizó sus poderes haciendo congelar las mentas de todos los que buscaban su muerte y se marcharon de allí.
-Profesor, ese hombre está muy mal. Le llevamos al hospital?- preguntó el chófer que le llevaría hasta el hotel ya que al día siguiente tendría que tomar un avión que le llevaría a Westchester. Echó una ojeada, apenas podía ver su rostro ya que la sangre lo había cubierto entero- Me ha manchado la tapicería del coche, las manchas de sangre tardan en salir.
Re: En Washington -Erik-
Un hospital. La idea se me antojaba perfecta, pero a la vez peligrosa. Se habría dado la alarma y seguramente estarían hordas de policías vigilando todos los hospitales de la ciudad en la espera de que apareciera aquel líder de la rebelión mutante, listo para ser encerrado. No, jamás dejaría que detuvieran a Erik de esa manera, pues a pesar de todo, hasta ahora no había hecho nada que mereciera ser encerrado... otra vez, además, lo sabía bien, no lo encerrarían, lo ejecutarían, y no iba a permitir eso.
Cuando el chofer se quejó de la sangre y la tapicería lo miré con molestia.-eal hotel, por la puerta trasera, y no se preocupe por la tapicería, le pagaré el doble.- Después de eso guardé silencio, me quité el saco y lo apreté suavemente contra la herida de Erik, tratando de evitar que se desangrara.
Llegamos al hotel por la puerta trasera y con la ayuda del chófer pude llevar a Erik a mi habitación. Ya ahí le di el pago convenido al hombre y borré su memoria para evitar que nos delatara si le daba miedo o alguien lo interrogaba. Luego me comuniqué con la recepción y solicité que un médico acudiera de inmediato. Esperaba haber tomado la decisión correcta y que Erik no se me muriera en esa habitación por falta de atención adecuada.
Re: En Washington -Erik-
Ahora tendido en la cama, la herida de la cabeza habia dejado de sangrar pero algunas heridas de su cuerpo,como el pecho o el muslo aún sangraban. Charles hizo venir a un medico que seguramente se encargaria de borrar su memoria como hizo con el taxista.
El medico entró y miró al hombre invalido para dirigir sus ojos hacia la cama, hacia la figura en la cama sin decir mas.- Que le ha pasado a este hombre? Este hombre debería de estar en el hospital, señor. Tiene un fuerte traumatismo en la cabeza. Está en coma... Dios santo, las heridas del pecho, parecen patadas"-Sin mas le arrancó la camisa abriéndola de golpe, haciendo saltar los botones por los aires.- No sé si tiene alguna costilla rota o u otra fractura, pero la pierna...el muslo izquierdo parece que lo tienen hinchado, fisura en el fémur. Señor tiene que llevar a este hombre al hospital porque puede morir en un momento o otro. Es el golpe en la cabeza.
Re: En Washington -Erik-
Aunque no tardó mucho en darme un diagnóstico que saltaba a la vista. Sus palabras me dejaron helado. No pude explicarle los motivos que me hicieron llevarle ahí en lugar de un hospital. Simplemente me limité a agradecer su ayuda y dejar que siguiera atendiendo a Erik hasta que pudiera moverlo de ahí.
Aquello era grave, Erik necesitaba de una ayuda que en aquel lugar no podía brindarle. En mi frustración opté por comunicarme con Hank. Esperaba que pudiera venir lo más rápido posible o que me instruyera sobre que debía hacer, ya que en ese estado me parecía imposible poder mover más a Erik, pues temía que pudiera hacerle daño. La voz de Hank al otro lado de la línea me tranquilizó. Estaba dispuesto a seguir sus instrucciones al pie de la letra.
Última edición por Charles Xavier el Dom Ago 17, 2014 9:10 am, editado 1 vez
Re: En Washington -Erik-
Por otro lado Hank McCOy se puso en contacto con Charles. Estaba en Westchester, en el laboratorio, haciendo uno de sus experimentos por cuenta propia, Charles debia de estar acostumbrado.
'Charles, que es lo que pasa? Es extraño que te pongas en contacto conmigo de esta manera'
u, si quieres mientras ellos dos estan hablando seria una especie de rol rapido.
Re: En Washington -Erik-
Mientras me comunicaba con Hank, dejaba que el doctor atendiera a Erik, esperando que no se diera cuenta de que tenía ante sí al terrorista Magneto y pretendiera por ende denunciarlo. Por evitar problemas sondeé su mente para averigüar si lo había notado... lo que vi no me gustó nada.
Aquel hombre estaba teniendo ideas realmente terribles para con Erik, la siguiente peor que la primera, incluso me hizo sonrojar y enfurecer a la vez. Cuando noté que, dejando de lado su lascivia, estaba terminando el trabajo de dejar a mi amigo lo suficientemente estable, irrumpí en el área de la habitación, le pagué sus honorarios y casi lo eché del cuarto, borrándole la memoria y ordenándole que volviera a su consultorio, sin que recordara nada de nosotros, en especial de Erik.
Volví al teléfono con Hank, al que había dejado un poco de lado en todo ese lapso.- Lo siento, Hank, tenía que resolver algo. Lamento mucho molestarte en este momento, pero... realmente necesito de tu ayuda.- Miraba a Erik, respiraba de manera difícil y pesada, se veía palido entre las marcas de los golpes y parecía muy débil.- No sé si saldría en las noticias, pero... A la salida del congreso unos manifestantes quisieron golpearme; no te preocupes, estoy bien, pero... pero Erik... él estaba aquí y se interpuso y ahora... ¡Dios! ¡Está muy malherido!-
Re: En Washington -Erik-
Era verdad y Hank no supo porque lo hizo. Erik casi le mata y ahora estaba con Charles. Pero le habia salvado, eso era algo que no podia creer. "A un hospital normal no puedes llevarle. Tenemos que traerle aqui, en el laboratorio, pero como lo hacemos? te envio el avión privado? Iré yo tambien, tengo que ver el estado de Erik y atenderle todo lo que pueda durante el trayecto de regreso"
Re: En Washington -Erik-
Pero Hank tenia un corazón tan grande como su intelecto y en lugar de pedirme que abandonara a Erik, se ofreció a venir a buscarnos con el avión, de modo que él pudiese tratarlo primero. Aquello me pareció perfecto, pues necesitaba a alguien experto que pudiera atenderlo, ya que el trato de aquel viejo verde que acababa de echar dejaba mucho que desear; quizá había dado un diagnóstico acertado, pero su forma de tratar al paciente... Bueno, definitivamente si no me hubiera involucrado no me quiero ni imaginar que podría haberle hecho.
-¡Hank, en verdad vales oro! Te espero aquí, sabes donde se encuentra el hotel y el número de la habitación. Por favor, Hank, no tardes, estoy muy preocupado por su bienestar.- Terminé la llamada y me acerqué a Erik. Aun estaba inconsciente y respiraba con dificultad. Esperaba que Hank no tardara mucho.
Re: En Washington -Erik-
Hank tardó en llegar una hora tal como le habia a Charles. Entró en la habitación del hotel cargado con una mochila en la cual llevaba un kit de supervivencia- El avión está esperandonos y el coche está abajo"-Hank miró a Charles con rostro preocupado cuando observó la herida de la cabeza- Menuda chapuza han hecho. Charles, está en coma. Debemos de sacarle de aqui enseguida- Erik no lo dudó, lo envolvió con la sabana y lo cargó- Vamos Charles, no hay tiempo que perder.
Cuando llegaron a Westchester School, Hank llevó a Erik al laboratorio, lo dejó en la camilla y empezó a ponerle vias en los brazos- Espero que no se despierte, sus poderes pueden estar descontrolados. Tu como estas Charles? Estas herido?"
Re: En Washington -Erik-
Lo que me dijo me estremeció, haciéndome sentir lívido y sin fuerzas. Temí lo peor, que haber dejado pasar tanto tiempo pudiera ser perjudicial. Hank no lo pensó dos veces, preparó a Erik y lo sacó del hotel. Fui junto con él y pronto llegamos al avión. El viaje de regreso a la escuela fue más rápido aunque no me lo pareciera por la impaciencia.
Llegamos a la enfermería y Hank, que ya llevaba a Erik con los primeros tratamientos durante el vuelo, lo conectó y preparó como era debido. Miraba a mi amigo con angustia, temiendo que aquello pudiera ser fatal y que quizá no volvería a verlo. Escuché muy de lejos la pregunta de Hank, sacándome de mi ensimismamiento.-Sí... yo, estoy bien, Hank. Dime... ¿Se repondrá?- Pregunté, temeroso de escuchar la respuesta.
Re: En Washington -Erik-
'Charles, solo quiero decirte que Erik está en coma y entre la vida y la muerte. No sé si despertará o llegará a despertarse, tiene un fuerte golpe en la cabeza. Solo podemos esperar'
Hank puso la mano en el hombro a Hank dandole animos y se marchó de la enfermeria dejandole con él a solas. Oyendose solo el sonido de la maquina de constantes.
Re: En Washington -Erik-
Hank se alejó y me dejó a solas con él. Me acerqué a la cama con el constante sonar de la máquina a la que se hallaba conectado como música de fondo. Levanté mi mano acercándola a él, dudando al principio por lo que la detuve un momento en el aire, pero luego la llevé hasta su rostro, pasando suavemente mi pulgar por su frente y sus mejillas.
Sentí de repente miedo, un gran miedo... miedo a que Erik no despertara jamás, que se quedara inmerso en ese coma por muchos años o algo peor... que no despertara nunca.
Tomé su mano y la estreché, pensando en todo lo que habíamos vivido desde que nos conocimos, pasando por nuestra separación y este reencuentro. Sentí que todo temblaba de solo pensar que se iría y que yo jamás pude decirle... Suspiré, tratando de no dejarme llevar por la histeria.
-Erik... por favor, tienes que despertar.-
Re: En Washington -Erik-
Habia llegado le momento de desconectarle y que descansara en paz. Charles era indicado de hacerlo, como amigo...
Re: En Washington -Erik-
En esos tres meses habíamos tenido intentos alocados por parte de algunos miembros de la hermandad para intentar rescatar a su líder, creyendo que nosotros lo teníamos prisionero; otros ataques de histeria cuando vieron su estado, pensando que nosotros lo habíamos lastimado, y al final la comprensión de que sólo nosotros podíamos intentar curarlo. Sin embargo, esa promesa parecía que no podía ser cumplida y cada vez que Hank parecía darse por vencido, yo le insistía, llevándolo a límites que antes no había pisado en pos de salvar a Erik.
Y ahora que habíamos agotado todas las expectativas, que ya Hank había intentado todo sin resultados y que yo había intentado tantas veces de conectar con su mente sin lograrlo, era, aparentemente, hora de dejarlo ir. Según Hank no había otro remedio, Erik se había ido hacía mucho y sólo nos quedaba su cuerpo.
Él iba a encargarse de hacerlo, pero le pedí que me dejase a mí. Después de todo, Erik era mi mejor amigo.
Me quedé un buen rato a su lado, llorando por tener que hacer esto, hablándole de nuevo, recordando los viejos tiempos juntos y rogándole que no se fuera, que volviera.
Sin embargo era en balde, lo sabía bien. No podía conectar su mente porque ya no estaba ahí y así sólo prolongaba su miseria. Era la hora de dejarlo ir, de despedirme...
-Adiós Erik... Te amo.- Le susurré, tomando aquello que lo conectaba a la vida y a punto de desconectarlo de ella.
Re: En Washington -Erik-
Erik abrió los ojos de golpe y todo lo recordó de golpe. Gritó el nombre de su amigo y se quedo sentado en la camilla saliendo se todo del control-CUIDADO CHARLES!.- fue como si su mente se reseteara. Miró sus brazos llenos de cables y se los arrancó de golpe gritando de dolor. Sus poderes se habían descontrolado.
Re: En Washington -Erik-
¡Eso quería decir...!
De repente mi silla, que también había sido afectada, me derribó, volcándose y haciéndome caer al piso para luego retorcerse y quedar reducida en nada. Miré a Erik, sintiendo de repente la presencia de su mente. Fue entonces cuando se despertó, gritando mi nombre, que tuviera cuidado, era como si siguiera en Washington, en aquel fatídico día.
Sus poderes se hallaban fuera de control porque él mismo se encontraba así. Mis alumnos corrieron a la enfermería, alarmados por el escándalo, pero no pudieron pasar porque la puerta se hallaba bloqueada a causa del poder de Erik. Me concentré para entrar en su cabeza.
-Erik... tranquilo, todo está bien, ya pasó el peligro. Calma tu mente.- Le dije telepáticamente, intentando hacerle entrar en razón y en control de sí mismo.
Re: En Washington -Erik-
Erik suspiró aliviado de verle, sus ojos parpadearon, llenandose de lagrimas, enrojecidos y cayó en la camilla exhausto. Habia regresado con él, a su lado. Era como si estubiera aliviado de verle allí, vivo.
Hank pudo entrar dejando a los demas fuera. 'Charles! Como estas?!' Fué hacia su amigo y le levantó omo pudo viendo la silla de ruedas echa un amasijo de metal. Miró a Erik que estaba mirando a su amigo desde la camilla
"Quiero irme de aqui, Charles!"
'Oh, no, tu te vas a quedar aqui, Charles'- Hank dejó a Charles en la camilla contigua y se acercó a Erik para intentar que no se marchara. 'Tengo que asegurarme de que estas estable, Erik. Acabas de salir de un coma de tres meses'
"Tres meses..."- Miró a su amigo sin poder creerselo- "Estoy bien, de verdad"
Re: En Washington -Erik-
Hank por suerte le puso un alto a sus deseos de marcharse, diciéndole a grandes rasgos lo que había ocurrido y que por ende no podía irse. Erik me miró y sentí que el corazón se me estrujaba al notar aquella incertidumbre en sus ojos, acompañada de la necedad de decir "estoy bien" cuando era obvio que no lo estaba del todo.
-Lo siento, Erik, pero Hank es tu médico por ahora y si él ordena que no puedes irte entonces eso se debe hacer. Hank, por favor, encargate de todo, revísalo y dime si necesita algo.-
» Erik M. Lehnsherr |Magneto|
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